Un delantero con olfato goleador, nos cuenta la historia que ha trascendido en Colombia sobre el momento más difícil de su vida. Dividida en tres etapas, contamos la historia de un hombre que jamás se rindió y que es el fiel ejemplo de que con trabajo y amor todo se logra en la vida.
Inicios y amor por el fútbol.
Todo comenzó gracias a su papá Alex Fernández, quien fue futbolista en las décadas de los 80’s y 90’s y le inculcó la pasión por el balompié: “Soy de la ciudad de Medellín, siempre ligado al fútbol. Mi papá fue profesional, jugó en Cali y Millonarios, un gran defensor central, desde pequeño estuve en los estadios viendo a las hinchadas y grandes jugadores como ‘El Pibe’, Bonilla y otros, desde ahí empecé a enamorarme del fútbol y tener ese proyecto de vida”.
Esa pasión por el ‘deporte rey’ lo llevó a practicarlo desde muy joven a pesar de haber vivido momentos económicos difíciles con su familia: “Después de que mi papá se retirará del fútbol vinieron momentos difíciles económicamente y nos vamos vivir a Medellín, en Castilla. Ahí empecé a jugar en las escuelas y a entrenar el doble con mi papá. Pase a jugar el Pony Fútbol, después el DIM me compra a los 13 y ahí empecé a tener todo más claro, debuté y jugué hasta los 18 allá”.
Leones F.C.
Antes de la sanción de dos años por dopaje, Brayan vivió grandes momentos en lo futbolístico con el equipo del oriente antioqueño: “En Leones llegué a prueba porque no me conocían mucho y pase por mi forma física porque en Brasil trabajé mucho y entonces me dejaron. Había un equipo bueno, donde estaban Moya, Arled Cadavid, Arley Rodríguez, Kevin Londoño y Felipe Banguero. Llegamos a la final contra Quindío y teníamos un gran equipo y muy feliz de haber estado ahí, aportando con goles, me da nostalgia recordar eso y feliz de haber pasado ese momento, no tanto por lo que pasó después pero si por lo que viví ahí”.
Sanción por dopaje.
“Yo no tengo rencor hacia nadie, en el momento perdone. Fueron momentos buenos y todo lo que viene con eso, jugábamos finales y me hicieron la primera notificación que los arreglan y me concentro en jugar fútbol. Cuando tenía una propuesta del exterior, ya tenía todo montado y en diciembre me dicen que no se puede hacer nada y me echan por echar”, manifestó Fernández al recordar lo que pasó con Leones F.C.
Respecto a la sanción por doping, el delantero manifestó: “Para mí eso fue como un baldado de agua fría, sentía que moría porque ya uno se hacía la imagen de estar mal e imaginar que no podrá jugar por 2 años y más cuando ellos me dijeron que me iba a defender y luego me dan la espalda. Los llamaba y no contestaban, sabiendo que cuando estaban en la buena ahí estábamos, fue duro lo que hizo el equipo conmigo, además me cancelaron el contrato”.
Aunque en lo deportivo realizó una gran temporada con el equipo antioqueño, ellos no lo apoyaron en el momento más duro de su carrera: “A lo último me dicen que no mandaron nada de documentación en mi defensa. Me sancionaron porque no tuve defensa y no tuve la oportunidad de defenderme, en ese momento la pase bastante mal sin poder recibir ayuda. No tengo rencor pero no es un equipo (Leones F.C) con el que esté agradecido”, sentenció.
Les presento al Brayan Fernandez q que me enamoró y me casé, mi mensajero! 🏍⚽️
— Margarita Guerra (@margaritag09) April 13, 2021
Hoy me salieron estos“recuerdos de galería ”.
Recordar casi 2 años dándolo todo de ti, mientras pagabas una sanción injusta y demostrabas inocencia!
si te admiro? CÓMO NO HACERLO👊🏻😍 @brayanfergol9 pic.twitter.com/OX9j7fjIZ6
La persona que siempre estuvo ahí para él.
Brayan contó lo que vivió en sus momentos difíciles de la sanción, donde a pesar de todas las circunstancias siempre tuvo el apoyo de su esposa Margarita Guerra: “Cuando estaba en un buen momento con Leones éramos novios, teníamos una relación bacana y ella me apoyaba mucho. Cuando llegó la sanción yo pensé que ella no me iba a poyar porque de pronto decía que “este ya no es futbolista” o piensa en algo económico, pero ella hizo todo al contrario y desde el primer momento me apoyó. Yo le dije que íbamos a hacer algo, trabajar o estudiar y entrenar en los estadios, ella estaba angustiada pero vio la fe y constancia, por eso nos admiramos mucho. Me compró una moto, me hizo una hoja de vida y me contrataron de mensajero llevando los servicios”.
Superación de vida.
Durante dos años su vida tuvo un giro de 180 grados, sin embargo Fernández recuerda con humildad todos esos momentos que lo marcaron como persona: “cuando iba en la moto y veía a mis compañeros jugando en la A se me salían las lágrimas, pasaba por una cancha y sentía que mis sueños se derrumbaban, pero bueno, yo seguía trabajando para volver a jugar, entregándole todo a Dios”.
Además, el hoy delantero del Bucaramanga recalca la clave para vivir una vida tranquila a pesar de ser una figura pública: “debemos ser humildes porque todos somos iguales, yo no soy más que nadie por ser deportista o porque me paguen más, esto que viví me hizo más sensible a todo eso”. Al igual que le envió un recado a las personas que le hicieron daño, “fueron muchos, me dieron la espalda y me cerraron las puertas, otros se aprovecharon como abogados y nada sucedió. A todas esas personas, la Federación y la Dimayor, simplemente les deseo cosas bonitas. La mejor revancha para mí esta en jugar al fútbol haciendo goles y buenas actuaciones”.
¡Su vida dio un giro de 180°! 🤩
— Rincón del Deporte (@RincondDeporte) April 24, 2021
Así describe @brayanfergol9 su experiencia con el @SantaFe 🇵🇱, equipo que le permitió jugar la Copa #Libertadores. 🏆
No te pierdas la entrevista completa en el programa del #PodcastRDD. 🎙️#LaNuevaEraDelPeriodismo pic.twitter.com/MrhMnZB3zk
Regreso al Fútbol Profesional Colombiano.
Después de pagar una sanción injusta, Brayan volvió a los terrenos de juego gracias al equipo ‘corazón del valle’. “Yo llegué a mitad del 2016 cuando Cortuluá jugó contra Medellín la semifinal de la Liga Águila, me encontré con un gran grupo, muy bacano y unido, fue un orgullo y estuve muy feliz. Inicialmente no confiaban en mí pero poco a poco logré ganarme un puesto, jugaba con felicidad, amor y pasión. Por eso siempre estaré agradecido con el Cortuluá”.
El equipo vallecaucano descendió a la segunda división tras finalizar el 2017, sin embargo el delantero emigró a un grande del FPC, el Independiente Santa Fe: “Llegar a ese equipo me sorprendió mucho, todo se dio, llegué a un grande. Yo venía de figurar y hacer cosas importantes, aunque no jugué mucho, fue algo muy lindo también por lo que tengo que agradecer. Sinceramente me llena de orgullo todo lo que se ha hecho”.
Su actualidad en el Atlético Bucaramanga.
Recientemente terminó el primer semestre del presente año para los ‘búcaros’, equipo al cual llegó en enero y donde tuvo buenas actuaciones a pesar de no clasificar a los ‘playoffs’ de la Liga BetPlay. “Estoy muy feliz en la ciudad bonita, me siento cómodo en el equipo y por momentos he estado muy bien. Creo que llegar con 20 o 25 jugadores nuevos es alguno bueno, en la mitad del torneo empezamos a jugar mejor, el ‘profe’ Suárez vino y estamos construyendo un gran proyecto y yo creo que ese es el secreto del Bucaramanga”, concluyó Brayan Fernández.
El fútbol como la vida da muchas vueltas y las buenas historias están en el Podcast de Rincón del Deporte. Escucha la entrevista completa en Spotify e Ivoox.
Redacción
Rincón del Deporte
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